De un blooper de la tele a exponer en el Congreso: la polémica del "hombre imán"
Recientemente, una legisladora nacional presentó un proyecto para "revisar la obligatoriedad" de las vacunas. Para justificar su argumento convocó a un hombre que aseguraba ser un imán de metales. Sin embargo, lo que no tuvo en cuenta es que años antes ya existía otro "hombre imán" que mostraba su supuesto magnetismo en la televisión.

Días atrás, la diputada nacional por Chaco, Marilú Quiroz, organizó una presentación en el anexo de la Cámara de Diputados de la Nación, con el objetivo de revisar la "obligatoriedad" de la vacunación. Para ello, llamó a un personaje polémico para demostrar el supuesto "magnetismo" que producirían las vacunas, pero lejos de ser tomada en serio, la exposición generó un escenario completamente adverso, donde resaltaron los memes y videos en redes sociales. Otro dato particular: años antes un hombre ya había mostrado sus "poderes" en televisión antes de la pandemia.
En la presentación, un hombre identificado como José Daniel Fabián pegó a su pecho distintos objetos, de una manera polémica y hasta irrisoria. El sujeto, a torso desnudo y con la asistencia de una licenciada, mostraba el presunto "magnetismo" que le habrían provocado las vacunas. Eso sí, sin ningún tipo de aval científico.
Otro de los aspectos que causó polémica fue que posicionó objetos no magnéticos en la parte superior de su pectoral y, ayudado por una pequeña inclinación hacia atrás, lograba que no cayeran al suelo. Incluso, en un momento de la presentación sacó de una mochila un disco de cinco kilos, que también se quedó "imantado" a su cuerpo.
"Esto no es grasa en la piel, señoras y señores", dijo la licenciada en Biotecnología Lorena Diblasi mientras intentaba pegar objetos al cuerpo del hombre. Luego relacionó el supuesto magnetismo con la inoculación durante la pandemia de COVID-19: "Esto le provocó la vacuna, a él no le sucedía esto y de esto no se habla. De esto se ríen a veces y yo quisiera saber qué dicen los médicos. Dos dosis de AstraZeneca, dos dosis diferentes", planteó.
Un aspecto que no tuvo en cuenta es que ya existía un "hombre imán" que había pasado por distintos programas de la televisión argentina. El supuesto magnetismo de su cuerpo se mostró al aire en ciclos conducidos por Guido Kaczka y Mariana Fabbiani, y ambas presentaciones ocurrieron varios años antes de la pandemia de COVID-19.
La primera fue realizada puntualmente en el año 2014, en el programa "El Diario de Mariana", donde Cabral afirmó: "Ejercitando gimnasia, física y concentración fui adquiriendo más peso". Ya en ese momento, la presentación fue similar, con una diferencia clave: en aquel entonces ni siquiera existían el COVID-19 y mucho menos las vacunas contra esa enfermedad. A pesar de ello, él ya mostraba su supuesta capacidad de imantar objetos metálicos en su pecho.
Años después, el truco fue el mismo, pero esta vez bailando al ritmo de "Back in Black" mientras dejaba cubiertos adheridos a su torso. Esta segunda presentación data del año 2017. Allí, Ángel comentó que esa "propiedad" la tiene mucha gente, pero que no todos lo saben, mientras sonreía con un tenedor en el pecho.
En ese momento, al igual que en la actualidad, generó más risas que repercusiones serias sobre eventuales efectos adversos de la vacunación. Incluso, durante la pandemia de COVID-19, Fabricio Ballarini, doctor en Ciencias Biológicas por la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, explicó que hay objetos que se pegan al cuerpo por la propia "tensión superficial". "Los objetos —no solo los imantados— pueden pegarse a nosotros porque existe una propiedad que se llama ‘tensión superficial’. El agua que hay entre los objetos y nuestro dedo genera una especie de ‘pegatina’".
En este mismo sentido, ya en 2021 la OMS confirmó que "las vacunas están libres de metales que causarían una atracción magnética al cuerpo".
Cabe mencionar que el mismo día, el ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones, publicó en X: "El Calendario Nacional de Vacunación contiene vacunas que se sostienen en evidencia científica y en décadas de uso seguro. Cada vacuna incluida pasó por evaluaciones rigurosas que garantizan su calidad y eficacia".
