Sáenz Peña: el Club Maracaibo reunió a sus socios para evitar perder su sede
La institución afronta una deuda que escaló a $170 millones por una obra realizada en 2015. Un juicio podría derivar en el remate del histórico club.
El Club Maracaibo de Sáenz Peña atraviesa una de las situaciones más críticas de su historia. La entidad deportiva convocó a sus socios para explicar el riesgo inminente de perder su sede, luego de que un juicio por una obra ejecutada en 2015 derivara en una deuda que hoy asciende a unos $170 millones.
El presidente del club, Enzo Alfonso, detalló la compleja trama judicial que se remonta a una obra realizada por la empresa Scala Metro, de Castelli, cuyos trabajos no habrían sido abonados. Mientras el conflicto avanzaba en la Justicia, la institución atravesaba un período de abandono administrativo: entre 2010 y 2018 no se presentaron balances ni se realizaron asambleas, lo que motivó la intervención de Personería Jurídica.
Alfonso explicó que los normalizadores designados nunca recibieron información clara de la comisión anterior. "No sabíamos qué había pasado con los fondos. Había comprobantes de que la fiduciaria envió el dinero al club, pero no estaban los libros ni balances para saber en qué se usó", afirmó. La falta de respuestas del antiguo directorio, que tampoco se presentó a declarar en el juicio, complicó aún más la situación.
La sentencia, dictada en 2023, fijó una deuda que se disparó debido a la mora y la inflación: pasó de $2,6 millones a aproximadamente $170 millones. Según Alfonso, la empresa rechazó un plan de pagos y exige cobrar la totalidad. "Ya pasaron más de diez años y quieren el monto completo", señaló.
Reunión con socios y posibles alternativas
Ante este panorama, este martes por la noche se realizó una reunión informativa con socios para analizar alternativas que permitan resguardar el patrimonio del club. Una de las propuestas provino del municipio, que ofreció afrontar la deuda a cambio de que el club pase a manos municipales, modificando su estatuto y perdiendo su carácter societario. "Es un patrimonio comunitario, no municipal. Por eso no podíamos aceptar sin consultar a los socios", aclaró el presidente.
Empresarios locales también manifestaron su interés en colaborar, teniendo en cuenta que el club posee cinco terrenos que podrían facilitar acuerdos o desarrollos inmobiliarios para generar recursos.
Alfonso insistió en que la comisión actual tomó conocimiento formal de la sentencia hace pocos días. "Nos enteramos por los medios", afirmó. Ahora, el objetivo es encontrar una salida urgente que permita evitar el remate y garantizar la continuidad del club como institución deportiva.
