Son ciegos y salvaron a un perrito: cambiaron el abandono por un hogar
El perrito mestizo que había sido visto deambulando entre la Plaza 25 de Mayo, la 9 de Julio y la laguna Arguello ya tiene un hogar definitivo con una pareja de personas no videntes que decidieron llamarlo "Mayo".
Todo comenzó a fines de octubre, cuando Miriam, una vecina que lo veía a diario, se contactó con Diario TAG para pedir ayuda y encontrarle un hogar. "Es re buenito, muy cariñoso. Se nota que está acostumbrado al cariño y que extraña a alguien", había contado entonces. Convencida de que había sido abandonado, se comprometió también a encargarse de su castración.
A principios de noviembre, Miriam consiguió una familia adoptiva: un matrimonio no vidente de Resistencia que se enamoró del animal desde el primer encuentro. Antes de dejarlo definitivamente, el perro pasó por un hogar de tránsito durante su postoperatorio y completó todo el esquema de atención veterinaria: castración, vacuna antirrábica, quíntuple, antiparasitario y simparica.
Este lunes, finalmente, regresó a la casa de Ángeles, su nueva dueña. Según contó Miriam, la adaptación fue inmediata: "Cuando fui a buscarlo para castrarlo, no se quería ir. En el tránsito estuvo bien, pero cuando volvió a la casa de Ángeles se instaló… estaba re contento".
Para la pareja, la llegada del animal parece haber sido más que especial. "Parece que nació para ella, dijo Miriam, es un santo. Se comporta re bien con Ángeles".
Además del acompañamiento cotidiano, Miriam colaboró con una bolsa de 20 kilos de alimento y se comprometió a seguir ayudando.
La historia, que comenzó con un pedido desesperado de hogar, hoy tiene un final feliz. El perro encontró una familia que lo necesitaba tanto como él a ellos. Y como destaca Miriam, el mensaje de fondo se mantiene: "No compren, adopten".
