Chaco es una de las provincias que aumentó la inversión educativa en la última década
Durante los últimos diez años, la inversión en educación cayó en 19 de las 24 provincias argentinas. Sin embargo, Chaco figura entre las pocas provincias que lograron sostener un crecimiento real del presupuesto educativo, aunque los salarios docentes igualmente se vieron afectados por la inflación.
El dato surge del informe "Financiamiento provincial: análisis del presente en perspectiva de la última década", elaborado por Argentinos por la Educación (AxE) y el IERAL de la Fundación Mediterránea. El estudio revela que, a nivel nacional, la educación perdió peso dentro del gasto público provincial y que la mayoría de los distritos redujeron su inversión desde 2014.
En el caso de Chaco, el informe destaca que la provincia mantuvo un crecimiento sostenido en la inversión desde 2020 y logró estabilizarla en los últimos dos años, a diferencia de Corrientes, Formosa y Misiones, donde se notaron caídas. No obstante, los salarios docentes chaqueños se redujeron en términos reales, afectados por la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID).
Martín Nistal, analista de datos de AxE y uno de los autores del estudio, explicó que "el principal componente de la inversión en educación es el salario docente, entonces fue el primero que se vio afectado por la inestabilidad económica". Según advirtió, esto impacta no solo en el presente, sino también en la capacidad de atraer nuevos docentes a futuro.
Por su parte, Osvaldo Giordano, presidente del IERAL, sostuvo que la caída general en la inversión educativa "profundiza el deterioro del sistema y puede generar un impacto negativo en los aprendizajes de los alumnos, ampliando las brechas con otros países e incluso entre provincias argentinas".
A nivel regional, el Noreste mostró un comportamiento dispar. Chaco fue la excepción positiva, mientras que Corrientes, Formosa y Misiones redujeron su gasto educativo en 2024 respecto del año anterior. El informe remarca que el contexto económico, marcado por la inflación, la caída del PBI per cápita y la reducción del empleo formal, limitó los recursos disponibles para sostener la inversión.
Finalmente, los especialistas coincidieron en que recomponer los niveles de gasto educativo dependerá de un ordenamiento de las finanzas provinciales. "El desafío más urgente es mejorar la gestión educativa y administrar mejor los recursos disponibles para que se traduzcan en mejores aprendizajes", concluyó Giordano.
