Periodista.
"No era una fogata común": revelador testimonio sobre cenizas y restos óseos
Un nuevo testimonio, policía de rastrillaje y búsqueda, aportó nuevos indicios sobre la presunta quema del cuerpo de Cecilia y la dispersión de cenizas en el río Tragadero, en un relato que vuelve a comprometer a César Sena y a Gustavo Obregón.
En el octavo día del juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, declaró A.E., un policía especializado en rastrillaje y búsqueda, con formación en enfermería y bombero voluntario. Su testimonio aportó detalles clave sobre los hallazgos realizados en Campo Rossi durante los operativos posteriores a la desaparición de la joven.
A.E. relató que el 11 de junio de 2023, durante un allanamiento, observó una quemazón en la zona conocida como la villa del río. Lo que llamó su atención fue que, entre las cenizas, se distinguían plásticos y restos blanquecinos similares a huesos.
"Me di cuenta de que no era una fogata común", declaró ante el jurado. Gracias a sus conocimientos en enfermería, identificó un fragmento "compatible con parte de un cráneo". El Gabinete Científico fue quien levantó los elementos encontrados y, según precisó, las suturas craneales humanas son "muy características", lo que reforzó su apreciación.
El testigo señaló que el 20 de junio regresó al predio, tras la declaración de uno de los imputados, Gustavo Obregón, quien debía reconocer el lugar. En esa oportunidad, se realizó un dique de contención y se vaciaron 50 metros del río Tragadero para inspeccionar el fondo.
Durante ese procedimiento, Obregón habría relatado, y luego se mostró un video proyectado hoy en la sala, cómo él y César Sena habían actuado días antes:
"Fui con César, pasamos por Carrefour, compramos bolsas de consorcio. Vinimos con las bolsas, levantamos con palas las cenizas. Yo me paré y él esparcía las cenizas por el agua", afirmó.
Agregó que César "movía el agua con un palo para dispersarlas" y que luego "prendieron fuego las bolsas en el agua".
En videos exhibidos al jurado, se observó a Obregón esposado, con una campera negra y jean, reconstruyendo paso a paso cómo recogían y arrojaban las cenizas al río. También se mostraron las reacciones de los imputados mientras veían esas imágenes: César con una mirada fija y perdida; Obregón inquieto, moviendo las manos, pero serio.
Durante el operativo, personal especializado halló el dije de la cruz de Cecilia, uno de los elementos más sensibles del caso. A.E. agregó que Obregón había dicho en ese momento que las cenizas habían sido trasladadas "desde la chanchería".
Finalmente, el policía destacó que también detectaron señales de un fuego importante a unos 200 metros de la vivienda y que el equipo de rastrillaje se concentró en las zonas donde el incendio había rodeado el río Tragadero.
El testimonio de A.E. se suma a una jornada marcada por material audiovisual contundente y por declaraciones que vuelven a comprometer a los principales imputados del caso.
