"No podía ni verlo, me generaba rechazo", dijo la madre de Cecilia sobre César Sena
En el cuarto día del juicio por jurados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, la madre de la misma declaró ante el jurado y los abogados y expresó que le daba rechazo ver a la ex pareja de su hija y lamentó no haberle dado un último abrazo.

La madre de Cecilia Strzyzowski, Gloria Romero, declaró este viernes ante el jurado popular en el juicio por el femicidio de su hija. "Estoy acá por el asesinato de mi hija", respondió al fiscal Jorge Gómez Bogado al inicio de su testimonio, que comenzó a las 17.50.
Romero relató que la última vez que vio a Cecilia fue el 31 de mayo de 2023, cuando la joven estaba en su casa cuidando a su perrita. Al día siguiente, antes del supuesto viaje, solo pudo hablar con ella por videollamada. "Solo fue César a buscar a la perrita. Le dije "Cuidamela", y él me contestó: "Siempre". No le pude dar un abrazo", dijo entre lágrimas.
Contó que los días posteriores intentó comunicarse con su hija, pero no recibió respuestas. "Era raro porque no había fotos ni publicaciones en sus redes sociales", señaló. Luego, empezó a recibir mensajes que, según ella, no eran de Cecilia: "Sabía cómo escribía, hasta los stickers que usaba. Era César quien me respondía".
Romero recordó que el 5 de junio la visitaron policías para pedirle una "prueba de vida", tras un aviso de una persona del barrio Emerenciano. "Me mandó un audio cortado que ya conocía. Me puse nerviosa y no me contestó más", relató, nuevamente conmovida.
Sobre su yerno, fue tajante: "No lo podía ni ver. Desde el principio me daba rechazo". También recordó que, tras casarse con Cecilia, Marcela Acuña —madre de César Sena— les pidió que se divorciaran e incluso ofreció dinero para que lo hicieran.
Romero narró que Cecilia y César compartían un negocio y que, durante una discusión, él la amenazó: "Le dijo: "Yo te mando dos monos y terminas en la chanchería"". Además, recordó comentarios escalofriantes de Sena sobre el "delito perfecto": "Decía que si no hay cuerpo, no hay delito, y que cuando los chanchos se comen el cuerpo y luego se los quema, no queda nada. Después se reía y decía "te la creíste"".
La testigo también mencionó que su hija no tenía buena relación con Acuña, a quien llamaba "la vieja chota". Por este comentario, la abogada defensora de Acuña objetó, lo que derivó en una deliberación y la suspensión de la audiencia.
La jueza Dolly Fernández decidió dar por concluida la jornada, ya que los jurados y abogados estaban exhaustos y Romero se descompuso. Su declaración continuará el lunes 3.
