Los médicos denunciaron irregularidades y confirmaron tener pruebas contra Melchiori
En el marco de la primera audiencia por el recurso de habeas corpus presentado tras los graves hechos de violencia ocurridos en la localidad de Taco Pozo, la doctora Viviana Izaguirre, presidenta de la Fundación Todos por Todos, denunció irregularidades en el accionar policial y cuestionó el cumplimiento de las medidas judiciales.
"Lo único que pretendo es que se haga justicia. El comisario sigue en Taco Pozo, sigue en la comisaría, sigue impartiendo órdenes. Acabo de recibir un video que lo prueba. Nada se ha cumplido, es una vergüenza. Todo lo que se hizo es un mamarracho", expresó con firmeza Izaguirre, visiblemente afectada por la situación.
La audiencia en la Cámara Primera en lo Criminal de Sáenz Peña a cargo del Juez Rodolfo Lineras, se da en el contexto de una causa que tomó repercusión nacional luego de que integrantes de la fundación fueran agredidos en un confuso operativo en esa localidad chaqueña.
Según relató Izaguirre, los hechos ocurrieron a las 6 de la mañana, cuando uno de los vehículos del equipo fue interceptado por un auto particular. "Una persona de civil, sin identificarse, descendió del vehículo, comenzó a patear la camioneta, intentó abrir las puertas y golpeó violentamente a uno de nuestros compañeros, Ezequiel, apenas bajó la ventanilla para ver qué pasaba. Lo atacó directamente", detalló la directora.
Lo más grave, según su testimonio, fue la complicidad de la policía local: "Llegó una patrulla de la comisaría, bajaron uniformados, pero dejaron que la agresión continuara. Luego se retira el agresor, y ahí empieza una pesadilla: detienen a una médica, se desencadena una serie de hechos irregulares. Fue un operativo absolutamente fuera de todo protocolo".
La Fundación Todos por Todos trabaja desde hace 12 años en la zona, y esta es la primera vez que denuncian un hecho de tal magnitud. "Nunca nos pasó algo así. Siempre estuvimos presentes en cada operativo. Esta vez fue diferente. Fue brutal", afirmó.
Izaguirre también expresó su preocupación por la seguridad de los integrantes de la fundación y, sobre todo, por los habitantes de Taco Pozo: "Cuando me preguntan si tengo miedo, claro que lo tengo. Pero más allá de mi persona, el verdadero miedo es por la comunidad. La gente sufre el abuso de esta persona a diario. Nosotros venimos a colaborar, a brindar asistencia médica y social, y nos encontramos con esto".
Finalmente, cuestionó la respuesta institucional frente a los hechos: "La justicia empezó a actuar recién después de una comunicación entre ministros de Córdoba y Chaco. Hoy, ni siquiera se han cumplido las medidas impuestas. Este hombre sigue allí, como si nada hubiera pasado".
