Denunció por violencia, separación e impedimento de contacto con su hijo
Una joven de 20 años relató que su expareja, de 59, la golpeó cuando intentó visitar al hijo que tienen en común. Denunció además que el hombre retiene al niño y pide que se lo devuelvan.
Una joven de 20 años denunció ante la División de Violencia Familiar y de Género de Presidencia Roque Sáenz Peña que su expareja, un hombre de 59 años identificado como R.A.M., la agredió físicamente cuando intentó visitar a su hijo. Además, sostuvo que el hombre utiliza al menor como herramienta de control y pidió intervención judicial urgente.
Según consta en la denuncia, la joven convivió con R.A.M. desde los 18 años. Durante ese tiempo —aseguró— fue víctima de violencia física y psicológica, incluso delante del niño. Hace aproximadamente diez meses, tras una nueva agresión sufrida en presencia del hijo que tienen en común, decidió abandonar el domicilio y trasladarse a vivir con su madre en la zona de Pampa Aguado.
Desde entonces, afirmó que el hombre se mantuvo ausente hasta que ella contrajo matrimonio con su actual pareja. A partir de ese momento, comenzó un conflicto legal por la tenencia y la patria potestad del menor.
En un intento por preservar el vínculo familiar, la joven accedió a que el niño tuviera contacto con su padre. Para ello, realizaron un acuerdo de palabra en la Unidad de Protección Integral (UPI), por el cual el hombre podía llevarse al niño algunas horas. Sin embargo, con el paso del tiempo, notó cambios en el comportamiento del pequeño y denunció que su expareja ahora lo retiene y le impide verlo.
El último episodio ocurrió el 13 de mayo, cuando la joven se presentó en la vivienda de R.A.M. acompañada por familiares y su actual pareja para pedir ver al niño. Según denunció, el hombre reaccionó de forma violenta, la golpeó y también agredió a una tía que intentó intervenir.
Tras el hecho, la joven solicitó ser examinada por un médico policial y pidió que se inicien acciones legales contra el agresor. La denuncia fue presentada conforme a las leyes provinciales y nacionales que protegen a las víctimas de violencia de género. Además, expresó su principal preocupación: recuperar a su hijo de tan solo dos años.
