"Me deformó la cara": denunció a su expareja por una golpiza y pide que lo busquen
Una mujer de 28 años fue víctima de una brutal golpiza que le dejó "toda la boca rota" por parte de su ex pareja y padre de su hijo. Ahora, la denunciante espera que lo busquen para detenerlo y llevarlo preso.
Una joven de 28 años, identificada como F.N.M., denunció haber sido víctima de una brutal agresión por parte de su expareja y padre de su hijo, G.S.B., en un hecho ocurrido el sábado por la noche en su vivienda ubicada en el barrio 300 Viviendas de Resistencia.
De acuerdo al relato policial, F.N.M. se encontraba esperando que su hijo fuera devuelto por la familia del agresor, cuando recibió una llamada de un familiar informándole que el niño se encontraba en compañía de G.S.B. y su actual pareja, circulando en motocicleta por la zona de la Sociedad Rural.
Mandanos tu info o reclamo por WhatsApp al 3624393128
Poco después, el hombre llegó hasta el domicilio de la denunciante, bajó al menor y lo empujó hacia el interior de la casa. Según consta en la denuncia a la que accedió este medio, que fue radicada en la Comisaría Cuarta: "Puta de mierda, ahora te acordas de tu hijo",tras insultarla, le propinó un golpe de puño en el rostro que le provocó lesiones en la boca, incluyendo la caída de algunos dientes.
"Me tiró al piso, me desmayó. Tengo toda la boca rota", relató la mujer en diálogo con Diario TAG. Afirmó que, en el momento, producto del shock, no sintió el dolor de los golpes, pero que al día siguiente comenzaron a aparecer las consecuencias físicas.
Durante el ataque, el agresor la sujetó del cuello y del cabello, la arrastró hacia la vereda y la redujo con maniobras propias de artes marciales —actividad que él practica—. Luego le dio una patada en el abdomen. La joven logró defenderse arrojando piedras, impidiendo que el agresor se acercara nuevamente.
Tras la denuncia, la mujer expresó: "Lo único que quiero es que lo lleven preso, porque él me deformó la cara. Que por lo menos lo busquen, porque en ningún momento salieron a buscarlo".
La denunciante también comentó que ya había realizado presentaciones previas por violencia de género y que incluso le habían entregado un botón antipánico. En una de esas instancias, fue informada de que existía una prohibición de acercamiento, medidas que evidentemente no fueron suficientes para evitar un nuevo episodio de violencia.
La denunciante permanece en su casa junto a su hijo, a la espera de una respuesta judicial. Mientras tanto, teme por su seguridad y exige justicia: "Ahora él debe estar en su casa, tranquilo, y yo acá con toda la cara destruida".
